Caso: Edificio Peñas Blancas
Uno de los edificios
emblemáticos en
Bogotá es el Edificio
Peñas Blancas, el cual
fue construido con excelentes
áreas sociales y para un segmento de población de estrato
6. En éste, la copropiedad inició
un proceso contra la constructora, por el arreglo de la fachada del Edificio por valor de
$8.000.000.000 y la Superintendencia de Industria y Comercio
falló a favor de la constructora,
condenando a la copropiedad
a cancelar $120.000.000 por
concepto de costas y agencias
en derecho.
El órgano juzgador explica que
las fachadas del edificio no son
un elemento estructural y que a
la luz del artículo octavo del estatuto del consumidor, no lo cobijaba la garantía decenal, sino de un
año, motivo por el cual concluye
que dicha reclamación ya se encuentra caducada y prescrita.
Este precedente judicial es fundamental, para tener en cuenta
que las acciones judiciales deben adelantarse en el término
de las garantías inmobiliarias y
no cuando ellas ya han caducado; así como la responsabilidad
que tienen los copropietarios,
consejeros de administración y
administradores a acondicionar
los presupuestos, acorde a las
verdaderas necesidades de mantenimiento de los edificios.
Nos hemos acostumbrado a
direccionar las culpas del deterioro normal de las edificaciones,
al constructor o al administrador
del edificio; pero nos resistimos
a incrementar los presupuestos
para evitar que la vetustez de las
edificaciones, termine en ruina.
Es difícil encontrar administraciones que realicen un proyecto
de inversión y mantenimiento de
los edificios a largo plazo, lo que
resulta en reparaciones más onerosas, que tienen que hacer los
copropietarios en el futuro.
En las próximas asambleas a
celebrar, necesariamente se tendrán que hacer incrementos a los
presupuestos y es muy importante que en éstos se contemple
el rubro de mantenimiento de
equipos e infraestructura, soportándolo con un buen estudio y
una proyección que impida el deterioro de la construcción, para
evitar asumir en un futuro sobrecostos por falta de una buena
programación.